Al igual que se podía leer en el post anterior, España se enfrenta a una enorme tasa de desempleo (el 20 % de sociedad está en paro http://tasadeparo.com/la-tasa-de-paro-de-espana-podria-alcanzar-el-21-en-2010.html). Sin duda, el país necesita una reforma laboral y la necesita de forma rápida, para superar las consecuencias de la crisis económica mundial. El gobierno ha propuesto la reforma que piensa que puede ayudar a resolver este gran problema laboral, pero los sindicatos y los trabajadores tienen unas opinones diferentes sobre este tema. Hay un visible conflicto de intereses y por eso los sindicatos decidieron organizar una huelga general contra el Real Decreto Ley . La huelga tendrá lugar el 29 de septiembre de 2010.
Por tanto es un derecho de los trabajadores y de los sindicatos como representantes suyos, convocar y asistir de forma masiva a todos los afectados por dicha reforma, a la huelga general del 29 de septiembre de 2010.
Hay una gran cantidad de controversias sobre la huelga. El presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, había dialogado con los sindicatos sobre la reforma laboral. Aún más, él está pensando en continuar este diálogo después de la huelga. Esto puede hacernos pensar que esto es sólo un juego político. ¿Por qué está la huelga prevista si las relaciones entre los sindicatos y el gobierno son tan buenas? Uno podría pensar que esto es sólo un acto teatral.
En opionión del Gobierno, esta reforma es una de las más importantes que se han emprendido en los últimos 20 años. Según María Teresa Fernández de la Vega, la reforma laboral servirá para dinaminizar el mercado de trabajo, incentivar la contratación de jóvenes, piensa que el despido será siempre la última opción del empresario. Además el Real Decreto Ley propone reducir la temporalidad excesiva e incentivar los contractos indefinidos, lo que significa estabilidad en empleo. El Gobierno piensa que la reforma laboral dará más puestos de trabajo, estabilidad laboral. También según el Gobierno, la reforma mejorará productividad y dotará mayor flexibilidad a las empresas. Pero ¿no significa que los empresarios vayan a tener más poder? El Gobierno creé que la reforma es una maravillosa manera de salir de la crisis, pero los sindicatos tienen opiniones completamente opuestas sobre este tema. También, los estudiantes que se incorporen en un futuro al mundo laboral se veran afectados por las medidas que se decidan en estos momentos. Por tanto la llamada a la huelga general el día 29 se verá apoyada por los estudiantes que consideran injusta esta reforma, que piensan que se deben equiparar los salarios a los salarios europeos, que se tenga en cuenta la preparación y no el “enchufismo”, que se acabe con la precariedad y temporalidad de los contratos, que se pueda tener derecho a una vivienda digna.
Opositores de la reforma sostienen que la reforma laboral es injusta socialmente y equivocada económicamente porque compromete las posibilidades de crecimiento económico y de creación de empleo. Por otra parte los sindicatos opinan que la reforma laboral permitirá al gobierno reducir severamente el gasto público, que sobre todo afectará a los trabajadores y a pensionistas. Puede ser que la reforma no vaya a servir para crear trabajo, sino todo lo contrario – facilitará el despido y empeorará las condiciones de trabajo. Esta reforma no sirve a los trabajadores, sirve a los empresarios que tienen más poder adquisitivo y que tienen en sus manos la facultad de realizar o no contractos permanentes. Es obvio por tanto, que los empresarios están satisfechos con esta reforma.
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